Por Claudia Díaz
Según la Fundación Hondureña para el Niño Quemado (Fundaniquem), entre 25 y 35 niños ingresan con quemaduras de diferente grado o mutilados por el uso de pólvora durante el mes de diciembre. Las estadísticas se mantienen en estos números durante los últimos tres años consecutivos, a pesar de los constantes operativos, campañas de sensibilización y decomisos o multas.
El pediatra de Fundaniquem, Darío Zúniga, invitó a los padres a no ver de lejos el peligro que representa la pólvora, ya que del 25 de diciembre al 1 de enero ingresan de 2 a 8 menores a urgencias.
Bajo ordenanza municipal de 2016, las autoridades edilicias realizarán intensos operativos de control de compra y venta de pólvora. “El fin primordial es evitar daños y pérdidas humanas”, expresó Daniel Moya, juez municipal del Distrito Central. En los diferentes operativos se esperan múltiples decomisos y multas o sanciones.
A las diferentes campañas de concientización se suman la Cruz Roja Hondureña, la Policía Nacional, el Cuerpo de Bomberos y Fundaniquem, que en este año amplió sus unidades de cuidados intensivos. Actualmente cuentan con la capacidad de internar a 30 menores, esperando una cifra menor en atenciones.
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