Esta iniciativa busca involucrar a la comunidad y preservar este importante lugar de culto, asegurando su conservación para las generaciones futuras
El padre Tony Salinas, responsable de la Iglesia Nuestra Señora del Carmen de Ojojona, lleva a cabo un proyecto de reparación de esta iglesia antigua para preservar su valioso patrimonio histórico y cultural.
“La construcción de la iglesia se inició en 1854 por el presbítero Diego Rafael Zelaya, pero quedó inconclusa, especialmente el retablo y el interior”, señala Salinas.
Añade que uno de los principales problemas que enfrenta la iglesia es la filtración de agua, lo cual ha causado daños en el inmobiliario y el piso del edificio. Por ello, se está trabajando en la reparación del techo para evitar goteras y filtraciones.
Así avanza el proceso de reparación del templo:
En ese sentido, la Parroquia San Juan Bautista de Ojojona ha lanzado una campaña de recolección de fondos para continuar con los trabajos de reconstrucción. Ha habilitado una cuenta bancaria para que los feligreses puedan realizar donativos voluntarios y así mantener la iglesia abierta y activa.
Esta iniciativa busca involucrar a la comunidad y preservar este importante lugar de culto, asegurando su conservación para las generaciones futuras.
Otras restauraciones
El padre Tony Salinas, desde que llegó a Ojojona, ha demostrado ser proactivo en diferentes aspectos de la vida cultural y religiosa de la comunidad.
Una de sus iniciativas destacadas ha sido la realización de reparaciones en varias iglesias. Esto incluye la reparación de las iglesias El Calvario de Santa y Ojojona, así como la Iglesia de Ceniceras. Además, realizó diversas restauraciones de imágenes de santos en las iglesias de Ojojona.
Estas acciones demuestran el compromiso del padre Tony Salinas con la preservación y el cuidado del patrimonio religioso de la comunidad, así como su voluntad de mantener las iglesias en buen estado para el disfrute de los fieles y el fortalecimiento de la vida espiritual en la localidad.
Reseña de la Iglesia del Carmen
Por una placa que se encuentra en el interior de este templo (cuyo texto estaba anteriormente pintado en una de sus paredes), se sabe que el Rev. Padre Diego Rafael Zelaya (QDDG), construyó este templo en 1854, dejándolo inconcluso por su repentina muerte.
Sin mayores datos fidedignos, dicha construcción se pudo deber a la devoción particular que tenía el Rev. Padre Zelaya a la Madre de Dios, con esta advocación y a un grupo de cofrades que deseaban honrarla de manera muy significativa en la comunidad. Algunos vecinos señalan que probablemente existió en este mismo lugar del templo un pequeño cementerio, cosa que no ha sido probada hasta la fecha.
De la hermosa imagen de la Virgen del Carmen hay que señalar que fue traída de los talleres de talla religiosa de Guatemala, en la primera mitad del siglo XX. Refleja la imagen un rostro de María plenamente sereno, con una mirada dulce y fija hacia quienes la visitan. Lleva en sus brazos a un inquieto Niño Jesús que se coloca en uno de sus brazos, sentado pero erguido, manifestando su confianza en el regazo de su Madre. Y, por otro lado, el trono desde el cual puede atender a nuestras muchas súplicas.
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